Conocimos “Socotra” en una nueva versión de la feria Expo Socias, en dependencias del centro de eventos Mitrinco, durante diciembre de 2022. Una gran variedad de artículos outdoor llamaba la atención en uno de los accesos traseros del recinto. Nos acercamos a indagar y nos cuentan que la mente maestra detrás del proyecto volvería al día siguiente, así que concertamos una entrevista. 

Aunque su nombre es Nicolás Cruces, se presenta a sí mismo como “Nico”. El penquista de 22 años, estudiante de cuarto año de ingeniería comercial en la Universidad del Desarrollo, se define además como “Tiktoker”, pues es un exitoso influencer en redes sociales. Pese a su corta edad, y gracias al apoyo de su familia, el joven lleva adelante el proyecto “Socotra”, con el que comercializa productos y pretende democratizar los deportes y actividades outdoor a lo largo de Chile. Esta entrevista se realiza en el patio trasero de Mitrinco, a la sombra de un toldo dispuesto como food court para el evento.

Nos llamó la atención la gran cantidad de productos outdoor que comercializas a través del proyecto Socotra. ¿Cómo llega un tiktoker, estudiante, de 22 años, a dedicarse a un negocio tan especializado? 

– Muy buena pregunta. Todo partió por una necesidad que tenía con mi papá. Queríamos irnos de viaje a la Carretera Austral y estábamos buscando unas carpas de techo y no encontramos en ninguna parte. O sea, había en China y EE.UU, pero las que había en Chile eran demasiado caras. Así que nos preguntamos “¿qué hacemos?”. Así que empezamos a buscar y pensamos: “Si no hay carpas de techo aquí, ¿por qué no mejor las traemos y vendemos?”. Y ese fue nuestro primer producto, las carpas de techo. Y la idea de nosotros fue democratizar el turismo de los chilenos dentro de Chile porque hay muchos que se van fuera y no disfrutan lo que tenemos aquí. La idea nuestra es que puedan disfrutar de la naturaleza en Chile. Así nació Socotra. De a poco fuimos expandiendo nuestro catálogo de productos hasta llegar a cosas ya no tan outdoor como los spa, pero la verdad es que tenemos todos los elementos para vivir una aventura outdoor. 

Imagino que traer otros productos se relaciona con haber encontrado un buen distribuidor… ¿Dónde buscaron y a quién encontraron?

– Nosotros comenzamos buscando en China. Aunque muchos productos son diseñados en Canadá o EE.UU, son manufacturados allá. Encontramos un buen proveedor y él nos dio también datos. Por ejemplo, cuando quisimos buscar kayaks, le comentamos y él nos dijo “mira mi amigo acá vende kayaks”. Así fuimos armando nuestra red de contactos. De a poco. A mucha gente, a veces, le da miedo empezar a importar cosas de China porque no sabe. Pero es algo que se aprende en el camino. Nosotros tampoco sabíamos nada. Así que invitamos a la gente que también lo haga, no es tan difícil. 

Entonces, esto lo hicieron sólo buscando, sin echar mano a ningún contacto. 

– Sí, buscando en Internet hasta encontrar un proveedor en China que nos ayudó a empezar nuestro negocio. 

¿Hay un segmento específico al que ustedes apuntan sus productos? 

– Apuntamos a toda la gente que quiera vivir la aventura outdoor. Pero segmento específico, así como por clase social, la verdad es que no. Tenemos productos para todos los segmentos. Hay productos que apuntan a un segmento y otros que apuntan otro. Pues la idea, como mencioné anteriormente, es democratizar el outdoor en Chile. Entonces tenemos distintos precios y distintas calidades. Tenemos de todo, la verdad. 

– Al principio, te presentaste como tiktoker. Como se sabe, Tiktok es una de las redes sociales más potentes del mundo, cuya única competencia directa es Instagram, pero su foco es el entretenimiento. ¿Utilizas esta plataforma para comercializar o dar difusión a tu proyecto, o bien, mantienes tus actividades comerciales separadas de tu vida personal en redes sociales?

– Por lo general, los videos que subo a Tiktok están separados de lo que es el negocio. Cuando quiero que se mueva más, intento darle un poco de publicidad, pero publicidad entretenida. El otro día, por ejemplo, fuimos a Pingueral a sortear un Kayak. La persona que adivinaba cuánto medía el Kayak se lo llevaba y una persona se lo ganó. Entonces, ese es buen contenido para hacer un video porque es algo gracioso y además estás regalando literalmente un kayak, entonces además hay gente que sale beneficiada. Es entretenido. Por eso, de vez en cuando hago videos que estén relacionados con mi contenido y adapto algún tipo de publicidad a ese contenido, pero no es que sea solamente una cosa o la otra.  De vez en cuando, subo un video. 

– ¿Este es tu primer proyecto de ventas?

– No, es como el tercer o cuarto. Podemos decir que el primer proyecto que tuve era llevar coolers al colegio, llenos de helados. Los dejaba en el laboratorio de química para que nos descongelaran. Y con la profe de química teníamos como un acuerdo para que me dejara hacer eso y yo le regalaba helados (risas). La cosa es que en el colegio no se podía hacer eso, claramente. Me descubrieron y se acabó el negocio. Pero con eso me pude comprar mi primer celular. Después tuve un negocio de lentes para eclipse, cuando fue el eclipse solar en el sur, donde vendía por Instagram. También tuve un pequeño emprendimiento de ropa, pero al final nada de eso resultó a largo plazo. Lo que está resultando ahora es Socotra. 

– Imagino que el hecho que Socotra sea el proyecto que “está resultando” tiene que ver con un modelo de negocios más trabajado. En cambio, ver una oportunidad de negocios en un eclipse es algo más específico y simple, por ejemplo. ¿Cómo ves la estructura de tu negocio, desde tu papel de dueño de la empresa?

– Al principio fue todo desordenado. Pero luego empecé a analizar las necesidades de las personas. Investigué un poco más a los competidores que tendría en Chile y qué productos había y que productos no estaban. Fui moldeando un poco, creé una página web, creé un perfil de Instagram. Le empecé a consultar a mis amigos qué cosas necesitaban ellos. Así, de a poco, me centré en las necesidades que pude identificar y en traer los productos que la gente necesitaba. De a poco lo hemos hecho “más ordenado”. Tampoco te puedo decir que es el negocio “más ordenado” porque esto salió de la nada. Fue una idea que nunca imaginé que podría llegar tan lejos. Fue espontáneo. Así que de a poco hemos ido ordenando, apuntamos a ser más profesionales cada día y a competir con algunas grandes marcas aquí en Chile. 

– ¿Tienes algún socio comercial en áreas complementarias a tu negocio, en Chile? Por ejemplo, operadores turísticos o agencias de viajes. 

– Por el momento, no trabajamos con ningún socio relacionado al turismo. Pero sí tenemos distribuidores de nuestros productos en el sur de Chile; Temuco, Puerto Varas. En Concepción también hay una tienda que distribuye nuestros productos en tienda física. Porque nosotros sólo trabajamos la tienda virtual e Instagram. Tienda física no tenemos. 

– ¿Alguna razón por la cual no hay tienda física? 

– La verdad es que el arriendo es bastante caro y la naturaleza de nuestro negocio es cíclica, entonces en invierno las ventas no son tan buenas, pero en verano sí. Entonces, no sale a cuenta tener una tienda física aún. Sí lo estamos pensando. Porque tenemos un terreno en el centro de Concepción, una casa que queda en Anibal Pinto, queremos remodelarla y poder hacer nuestra tienda ahí. Estamos ahorrando un poco.

– Es poco frecuente para personas jóvenes desarrollar proyectos de larga proyección… ¿Qué le dirías a un emprendedor de 22 años con ganas de hacer algo interesante? 

– Mira, yo le diría que se atreva. En promedio, un emprendedor necesita 7 emprendimientos malos para que uno realmente funcione. Que se atrevan. No necesariamente hay que comenzar con algo grande, puede ser algo chico, para ir probando. Y darle, darle, darle. Hay que ser perseverante y constante. Eso es algo con lo que me identifico mucho. No hay que darse por vencido nunca. Hay días que son malos y te desmotivan, pero hay que pensar siempre en los objetivos que uno tiene como persona y como empresa. Al final, así es como las cosas funcionan. 

– ¿Han sido beneficiados con fondos públicos?

– No. 

– ¿Tienen planes de hacerlo a futuro?

– Mira, si es que sale algún proyecto interesante es una opción que no podemos descartar. Pero hasta el momento, nada planificado. 

– Hay hartos proyectos que comienzan con el fondo público. ¿Por qué ustedes no?

– Por el momento, estamos bien. Estamos yendo de a poco porque recién llevamos un año y no queremos abarcar mucho y luego no dar abasto. Queremos primero levantarlo bien y luego ver cómo crecer más. Estamos en un proceso de crecimiento orgánico. Esa sería la única razón. 

– ¿Algo que quieras agregar?

– Sí, que la idea de este negocio siempre ha sido democratizar los productos, de distintos precios y calidades. Pero además tenerlos todos en un solo lugar. Eso siento que es algo que nos identifica y diferencia (salvo de tiendas grandes del retail). En Socotra hay todo lo que se necesita para ir al outdoor en un mismo lugar. Hay, por ejemplo, tiendas que venden sólo ropa outdoor, ferreterías que te venden ciertos insumos; nosotros tenemos todo en un mismo lugar. Eso es un atributo que nos diferencia y hace a Socotra ser lo que es. 

– ¿Alguna proyección para el futuro?

– Como te decía, tener nuestro local físico y comenzar a trabajar en Argentina. Mucha gente de allá nos pregunta por nuestros productos, sobre todo de la Patagonia, porque allá no están. El único problema son los envíos, pero nos gustaría entrar al mercado argentino en un futuro. 

– ¿Medios de contacto?

– Tenemos página web, http://www.socotra.cl y nuestro Instagram: https://www.instagram.com/socotraoutdoor/ 

Texto y Fotografía: Fabián Rodríguez

frodriguez@thepenquist.com 

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